La intimidad es uno de los aspectos más importantes de las relaciones en pareja. Es el ingrediente clave de la complicidad. Cuando la intimidad es sólida, las relaciones también.
Sin embargo, como cualquier vínculo en pareja, no está excepto a conflictos y problemas. Especialmente cuando las relaciones se vuelven emocionalmente íntimas.
Son muchos los problemas: sexuales, falta de comunicación, problemas de salud, etc. Estos, muchas veces, pasan por alto debido al desconocimiento. La realidad es que, mientras más rápido sepamos cuál es la raíz, y lo enfrentemos, mejor serán nuestras relaciones.
Independientemente de la gravedad, queremos enseñarte cómo afrontar los problemas íntimos en la pareja. Veremos cuáles son los problemas comunes en pareja y las posibles soluciones para que tu relación sea saludable.
¿Cómo afrontar los problemas íntimos en la pareja?
Tabla de contenidos
¿Problemas en la intimidad? ¿Tu vida sexual y emocional no es la misma de antes? Continúa leyendo. Aprende a resolver los conflictos íntimos más comunes en pareja.
Comunicarse
La comunicación es fundamental en las relaciones de pareja. Dos personas que no se comunican es imposible que se entiendan.
Es imposible que, a medida que se viven juntos y conocen en la intimidad, no surjan problemas. Serán en mayor o menor medida, pero sucederán y hay que estar preparados para ellos con una sólida estrategia de comunicación.
Hablen las cosas. Digan qué es lo que les molesta en la cama o la vida cotidiana. La solución no es tragarse lo que se sienten y acumular rencor.
Es tan fácil como tomarse unos 20 minutos al día y escuchar lo que la otra persona tiene que decir al respecto.
Eso sí, no basta solo con escuchar. Hay que abrir la mente y comprender las preocupaciones e inquietudes de tu homónimo de pareja. Especialmente si es en el ámbito sexual.
Resulta sorprendente que, a día a de hoy, muchas parejas se sientan incómodas hablando de sexo. No hay nada de malo en ello. Una buena comunicación sexual puede ser la solución a una mala relación sexual.
Digan qué es lo que le gusta en la cama, dónde hay que tocar, en qué ritmo o intensidad hacerlo, qué no está permitido, y así sucesivamente.
Incluso los problemas de salud que perjudican el buen sexo tienen solución. Por ejemplo, comprar medicamentos de viagra en Kamagra Farmacia para tener mejores erecciones en la cama, o ir a un especialista que examine otros inconvenientes ligados a una afección médica.
Aprende a gestionar los conflictos
El 80% de las personas, independientemente si están en una relación de pareja, no saben manejar los conflictos. Es lógico. La resolución de conflictos es una habilidad y, por tanto, debe aprenderse.
Cuando hay discusiones y desacuerdos en pareja, lo más fácil es apartarse. Dejarlo de un lado. Sin embargo, incluso la mínima discusión puede convertirse en una grieta a medida que aparecen más y más dilemas.
En consecuencia, lo más inteligente y sano es gestionar los conflictos como hacen los profesionales.
¿Cómo?
- Calmar los sentimientos de ira y frustración
- Mejorar la comunicación
- Buscar los motivos de raíz
- Entender a tu contraparte
- Poner límites
Hacer actividades juntos
Este es un consejo genérico, pero no por menos efectivo. Realizar actividades juntos es una manera de unirse y conocerse en profundidad. Incluso si tienen años de relación o matrimonio.
Las parejas que juegan unidas, permanecen unidas.
Es tan fácil como salir una noche a comer, pasear a los perros juntos o inscribirse en el gimnasio. Cuando hay química en la cotidianidad, también en la intimidad.
Ir a un consejero
Finalmente, si el problema es demasiado grande como para manejarlo por cuenta propia, lo más prudente es asistir a los consejeros de relaciones, profesionales capacitados para ayudar a las parejas a superar los conflictos en la intimidad.
Es triste que la figura de los consejeros de pareja esté tan estigmatizada en la sociedad. Incluso las parejas que no tienen problemas deberían ir con profesionales.
Es una buena manera de resolver conflictos y desacuerdos. Encontrar puntos en común, hablar las cosas de mejor manera, aprender cosas del uno y del otro, y por supuesto, afrontar los problemas íntimos en la pareja que no parecen tener solución.
