Nuestra sociedad se encuentra en continuo cambio y uno de los más característicos del siglo XXI es la forma de pago en cualquier establecimiento. Seguramente, sobre todo si eres joven, no sueles llevar mucho dinero en metálico en tu cartera porque el dinero virtual se ha puesto de moda y ha venido para quedarse.
Según M. G. Pascual, del diario El País Economía, cada día son más las personas que prefieren pagar cómodamente acercando su tarjeta de crédito, su teléfono móvil e incluso su reloj inteligente al datáfono. Esta acción facilita a los usuarios poder controlar su dinero desde una aplicación bancaria instalada en el móvil y saber cuáles son sus movimientos en tiempo real con tan solo escanear su huella electrónica, muy lejos de tener que acercarse a la sucursal del banco a actualizar la antigua cartilla.
Seguramente esta revolución ha sido posible gracias al éxito del comercio online en páginas web como Amazon, eBay o AliExpress entre otras, que se inició hace décadas como algo excepcional con cierta desconfianza por parte de los consumidores. No obstante, hoy en día, las compras a través de la red están tan normalizadas que las ofertas de trabajo de repartidor de paquetes están muy demandadas.
A causa de la gran afluencia del empleo del dinero online, en 2009 comenzaron a usarse las criptomonedas, monedas virtuales que garantizan la seguridad en las transacciones bancarias y que sirven para comprar bienes o servicios a través de internet desde cualquier parte del mundo. La primera moneda digital que se creó fue el Bitcoin y hoy en día es la más usada en todo el mundo, aunque también existen muchas más como el Litecoin, Ethereum, Ripple o Dogecoin.
Y es que el avance de las criptomonedas no pasará desapercibido en la sociedad en la que vivimos. Cada vez son más los sectores que tienen en mente incorporarlas como moneda de pago o premio. Quizás en un futuro, los grandes sectores como el de los deportes electrónicos presenten las recompensas de los mejores premios de los Esports en criptomonedas y el dinero físico desaparezca para dar paso a una nueva era de dinero virtual, tal y como ocurre en muchos videojuegos.
En nuestro país, este método de pago ya ha llegado a algunos establecimientos de Madrid y Barcelona, las dos grandes ciudades españolas que ya poseen varias decenas de comercios que admiten el Bitcoin como forma de pago y en las que se puede observar cómo este método de pago cada vez tiene una mayor acogida entre la ciudadanía. Por tanto, esta forma de pago ya no es solo de grandes empresas o potencias, sino que está al alcance de cualquiera y, poco a poco, si las predicciones no fallan, se convertirá en la más usada en los próximos años. De hecho, puede que nuestros sueldos algún día sean en criptomonedas.
Cuando realizas una trasferencia bancaria a un familiar o una compra desde otro país, el dinero suele tardar varios días en llegar y en la mayoría de los casos los bancos se quedan con un pequeño porcentaje en concepto de intereses. Las criptomonedas mejoran nuestro manejo del dinero, haciendo que el envío a la cuenta de destino sea inmediato y libre de cargos. Por tanto, es una buena alternativa cuando queremos realizar movimientos con nuestro dinero.
En conclusión, podemos decir que nuestra sociedad evoluciona e intenta que sea a mejor; en este caso, las monedas digitales nos permiten poder pagar en cualquier momento y desde cualquier lugar de manera efectiva a través de nuestro ordenador o teléfono móvil. Además, consiguen que el envío del dinero sea inmediato y con la garantía de que el destinatario lo recibirá instantáneamente. Por tanto, es el momento de empezar a despedirnos del dinero físico porque las criptomonedas no tardarán en llegar a nuestra vida diaria.