Luego de salir a flote la noticia de que Facebook tendrá su propia criptomoneda el Ministro de Economía del Gobierno Francés fue uno de los primeros en pronunciarse. Demostrando así su preocupación al permitir que la Libra “nueva criptomoneda” llegue a ser utilizada como fuente de financiación de organizaciones terroristas.
Por lo que, una de las acotaciones que hace el Ministro con respecto al manejo de esta criptomoneda mediante empresas privadas, es que dichos valores deberían ser regidos por el estado, así como el funcionamiento de la misma.
Algo contradictorio, ya que el funcionamiento de las criptomonedas debes estar desligado de cualquier entidad central, esto como medida de protección ante las restricciones realzadas por cualquier gobierno.
Grandes Problemas para Facebook
El Ministro, de igual manera, considera importante que, los bancos relacionados con el nuevo proyecto de Mark Zuckerberg den a conocer los beneficios que obtendrán a través de él.
El motivo del pronunciamiento, es debido al riesgo que pueden correr los millones de usuarios con los que cuenta dicha red social.
Para el gobierno Francés la integridad y seguridad de los usuarios de Facebook es la prioridad, ya que el gigante digital estaría manejando información confidencial no autorizada por los usuarios.
El Ministro Le Maire, expresa que, solicitaría garantías a la entidad para así apoyar el proyecto, ya que alega que, los problemas de privacidad serán un hecho, al ser una red social tan popular, tomando en cuenta que la misma será la plataforma visual para el minado de dicha criptomoneda, y se regirá mediante empresas privadas radicadas en Suiza.
Expertos en criptomonedas aseguran que, al no estar la Libra vinculada con alguna moneda nacional, se estima que, su valor “estándar” del que habla Mark Zuckerberg no sea creíble, lo que se traduciría en un sinfín de problemas al intentar canjearla.
Si no hay aprobación por parte del estado, el Ministro asegura que, el proyecto del visionario de Facebook, no tendrá resultados favorables. Al menos no, desde su punto de vista.
Aunque las criptomonedas facilitan cualquier proceso de transacción a través de distintos medios digitales, aun existen entidades que dudan de la autenticidad del proyecto.
