Cuando tenemos una cuenta de banco, es necesario que tomemos en cuenta las diferentes comisiones bancarias que nos pueden aplicar por ellas. Existen bancos sin comisiones en España, pero hay otros que sí la cobran, y como clientes hay que estar atentos a las normas bancarias.
Para las instituciones que sí lo hacen, algunas cobran más barato que otras, y está establecido en los contratos de la cuenta. Esta es una de las ocasiones donde más debemos prestar atención a las letras pequeñas que tienen documentos que vayamos a firmar.
Aprende en este artículo sobre las características principales de las comisiones bancarias.
Comisiones bancarias
¿Qué son las comisiones bancarias?
Las comisiones bancarias son cobros que realizan muchos de los bancos a los clientes por tener una cuenta dentro de la institución. Pueden ser de mantenimiento del servicio o también por emisiones de tarjeta de crédito, y que se cobran automáticamente en la cuenta.
Pueden tener una tasa fija o porcentual, y el propósito de su cobro puede ser también por los servicios básicos de cuenta. Incluso es posible que se cobren cargos de terceros por los servicios prestados a la entidad para resolver las necesidades del cliente.
Se pueden cobrar juntas de una forma genérica, como una tarifa plana, o separadas, con cargos individualizados por cada servicio específico prestado. En las cuentas de tipo banca digital se suelen quitar dichas comisiones bancarias o disminuir sus costos de una forma bastante aprovechable.
Existen comisiones por contrataciones de hipoteca, cuando no se pagan los créditos del préstamo al tiempo convenido por el banco con anterioridad. También pueden ser por cancelar la hipoteca y también al abrirla, incluso por cambiarla a otro banco o hacer una conocida subrogación.
Hay comisiones bancarias por sacar o transferir dinero, que son dos de las opciones más básicas de cuenta dentro de un banco. Se hacen cuando una persona saca dinero de un cajero automático con una tarjeta de crédito, pero no con la de débito.
También hay distintas comisiones que se realizan por tener números rojos o por falta de saldo, que generan un interés bastante alto. En algunos países tienen prohibidas estos tipos de comisiones, porque afectan a los clientes en gran manera cuando carecen de fondos monetarios.
Por último, también hay unas comisiones que se le aplican a los comerciantes, cuando reciben pagos con tarjetas, por porcentajes bastante bajos. Igual esto depende del banco, ya que hay otros que pagan en su lugar.
Otros tipos de comisiones bancarias
Están las comisiones por cada apunte o cobro de recibo, que también pueden variar según el banco y las normas del país. Una comisión común es por sacar dinero de cajeros que no pertenecen a la red de bancos donde se tiene la cuenta.
Cuando se transfiere dinero a otro banco o entidad, también es posible que cobren unas comisiones al cliente que realiza el movimiento. Cuando se tiene poco saldo, es común que muchos bancos hagan pequeños cobros por mantenimiento, ya que no hay flujo de dinero.
Hay instituciones de banco que cobran unas comisiones a las empresas y trabajadores por domiciliar una nómina de trabajo en sus sistemas. Sin embargo, hay otras que fomentan a esta acción premiando a las personas que lo hacen, con posibilidades de préstamos y más.
Una de las mayores críticas a las comisiones bancarias es que el cliente no puede negociar con el banco por las mismas. Esto se debe a que es el banco el que establece las comisiones, evitando fuga de clientes con acuerdos a otros bancos.
También son muy criticadas porque el cliente necesita obligatoriamente en la actualidad el servicio de un banco para poder resguardar su dinero. Por lo tanto, no puede prescindir de la cuenta y tiene que tratar de ajustarse a todos los requerimientos de la misma.
Hay ocasiones donde las entidades bancarias han cometido fraudes y estafas utilizando dichas comisiones, para beneficiarse y obtener más ganancias del cliente. Lo hacen mediante la falta de transparencia en los contratos, con cláusulas abusivas y sin informar a los clientes las condiciones pertinentes.
Las instituciones legales de un país tienen la responsabilidad de establecer normas y leyes que supervisen las actividades bancarias con sus clientes. Esto con el propósito de proteger a todos los ciudadanos de cualquier acto fraudulento.
¿Cómo evitar las comisiones?
Muchos bancos les permiten a los clientes evitar las comisiones o reducir sus costos, cumpliendo una serie de requisitos que son esenciales. Más que todo se basan en los distintos procesos de vinculación, como el hacerse un nuevo cliente o abrir una cuenta online.
Para esto se necesita establecer una buena comunicación con el banco, para saber qué posibilidades existen para evitar estas comisiones o disminuirlas. Muchas de ellas pueden ser de cargos a cheques, y hablando con un trabajador de la institución se pueden aclarar las dudas.
Otra opción puede ser la de conservar un saldo mínimo en la cuenta que no le otorgue las comisiones por pocos fondos. Es necesario que dicho monto se mantenga fijo para que no haya ningún cobro a la cuenta, incluso por un largo período.
Cuando realice las compras, trate de utilizar tarjeta de débito o crédito, para que no haya comisiones por retirar efectivo de cajeros. En algunos bancos se solicita que se usen una cantidad mínima de veces al mes para evitar cargos adicionales a la cuenta.
Puede agilizar sus acciones de cuenta y evitar comisiones utilizando la consulta de saldo y de los estados de cuenta en línea. Muchas personas al imprimir su estado de cuenta, reciben unas comisiones de parte del banco, lográndolo evitar a través de la web.
Inscribirse en el depósito directo de cheques también puede servir, donde se reciben los pagos de sueldo y también beneficios del gobierno. Sólo se tiene que consultar al banco si el monto mínimo es de un depósito único o de un total de ellos.
Evitar las comisiones bancarias es una excelente estrategia para conservar el dinero eficientemente.
